Ahhh!!, tambien hubo un tiempo para la angustia propio de estos lugares. A la salida nos confundió que hubiese de salir por ese paso tan estrecho (paso de los guardias civiles) y nos desesperamos por encontrar otra salida que no hay, hasta metimos a Roberto por el agujero del centro y menos mal que no era porque por ahí no entrabamos los demás.
Os dejamos unas fotos de las muchas que hicimos.
Dejamos atrás la luz del sol.......
Rapel (9m.) de entrada
Por aquí se pueeedddddeeeeeee........
Después de esto de abren varias salas con multitud de formaciones.
Muy bueno el servicio de bar
Parece que estamos derrotados.
Una visita muy recomendable, sobre todo si tienes el tipo fino, manteniendo todo el respeto para preservar la belleza de este lugar singular.
Os esperamos en la próxima.